Qué mejor manera de acompañar una cena que con un vino. Vino tinto, vino blanco, ¿cualquier vino? Bueno, la decisión tiene que ver con lo que cenarás… y el clima… y las personas que están contigo.
Si alguna vez viajaste a Madrid, España, seguramente visitaste la Puerta del Sol. Y por supuesto que has visto el gran cartel de neón de Tío Pepe.
La agencia local de soluciones multimediales TMedia, introdujo una nueva dimensión en las etiquetas de los vinos Tío Pepe. Tal como Giovanni Rana utilizó códigos QR, Tío Pepe abrió sus puertas a los amantes del vino con el fin de que se enteren acerca de su historia a través de información y visitas guiadas virtuales que son realmente impresionantes. Todo esto y mucho más con el poder de los códigos QR dinámicos, creado a través de uQR.me.
Desde el comienzo del 2015, los códigos QR han probado ser medios muy útiles para proveer información enriquecedora y atractiva de temas que pueden pasar desapercibidos. Gracias a los QR nos hemos vuelto curiosos; queremos saber que se oculta detrás de los códigos, y en este caso, disfrutar lo que quede de este delicioso vino.
Un poco de historia de Tío Pepe
La bodega que produce una gama especial de Jerez (un vino fortificado elaborado con uvas blancas que se cultivan cerca de la ciudad de Jerez de la Frontera, en Andalucía, España) fue fundada en 1835. Comenzó con sólo diez barriles enviados a Inglaterra y luego creció para convertirse en una de las bodegas más importantes de Europa, con más de 4.000 hectáreas de viñedos en España. Más aún, en 1955, la bodega creó el primer centro privado de investigación enológica para garantizar sus estándares de calidad y de desarrollo.