Nunca deja de sorprender a cualquier persona que conoce el poder de los códigos QR, cuando alguien en marketing declara que los códigos QR no funcionan. Por supuesto, esto es porque algunas iniciativas de marketing hacen mejor las cosas que otras. No son los mismos códigos que llevan al fracaso, sino la forma en que se utilizan. Lo mismo puede decirse de cualquier campaña de marketing. Si no sabes las herramientas y cómo usarlas, no puedes esperar el éxito.
Historia del marketing antes de los códigos QR
Incluso antes de la creación de los códigos QR, existieron enormes errores de marketing y diversas marcas sufrieron mucho por ello. El mal uso de cupones y llamadas a la acción siempre han tomado caminos equivocados por los «expertos en marketing» y si alguna vez te has sentado en una sala de conferencias, con la boca abierta ante una propuesta para una campaña de marketing que sabías estaba condenada mientras salía de la boca de otra persona de marketing de una larga línea de vicepresidentes ingenuos, aquellos que se niegan a utilizar los códigos QR y los declaran inútiles son semejantes a quienes temían la penicilina como droga para infecciones y enfermedades venéreas.
Es fácil mencionar enfermedades venéreas y marketing inútil en la misma frase, ya que ambos son el resultado de una «wangenstein» en el lugar equivocado, en el momento equivocado. La respuesta fácil para aquellos que dicen que los códigos QR no funcionan es que no los han utilizado correctamente.
Las reglas de marketing son bastante simples: conocer las características demográficas y darles lo que quieren y, sobre todo, crear la necesidad mientras se usa el producto para satisfacer esa necesidad.
Errores con Códigos QR
Está generalmente aceptado que usar un código QR tiene que cubrir varias reglas importantes para trabajar correctamente:
- ¡El código tiene que ser escaneable! La colocación de un código QR en un lugar extraño, en lo alto de una valla publicitaria o un vehículo a velocidad no se puede escanear. Los códigos muy pequeños para ahorrar área de impresión no se pueden escanear.
- Los códigos QR tienen que tener una llamada a la acción para motivar a los consumidores a escanearlos. La palabra «gratis» tiene una atracción innegable, al igual que la promesa de descuentos, más información y otras cosas interesantes que extienden el uso del producto (es decir, 50 recetas para esa caja de macarrones con queso).
- El código tiene que estar ligado a un sitio responsive para que sea fácil de navegar desde cualquier dispositivo (por ejemplo, un teléfono móvil, tablet y pronto, Google Glass!).
Muchos emprendimientos de marketing utilizan sólo una o ninguna de estas reglas y eso deletrea desastre. ¿Y qué se genera a partir de un desastre? Fracaso y poner la culpa en los códigos QR porque ¿quién quiere perder su cómodo trabajo de marketing?
Lee: ¿Porqué algunos marketineros odian los códigos QR?
¿Qué podría ser más fácil que un Código QR?
Hay una razón de por qué los smart phones ahora vienen con aplicaciones de lectura de códigos QR (y una aplicación para el uso de NFC); ¡los consumidores ESTÁN usando códigos QR! Piensa en tus propias compras. Estás parado en una tienda, mirando un paquete y te preguntas algo que no está incluido en la caja. Tal vez haya un URL que puedas introducir en la aplicación de Internet de tu dispositivo móvil. He aquí los pasos que tendrías que tomar:
- Saca tu teléfono, ve a la aplicación de Internet, escribe la dirección URL y llegarás la página principal. ¿Cuánto tiempo te lleva eso? Incluso si tienes el equipo más nuevo, bien sabes que te lleva tres o más minutos para llegar a ese punto.
- Buscas entre el contenido hasta encontrar lo que deseas. ¿Cuánto tiempo llevará? ¿Cuatro minutos o más? Eso no incluye el tiempo que vas a pasar leyendo la información que buscas.
- Agotarte porque el enlace no te dio nada que valga la pena todo ese tiempo y esfuerzo.
Si has escaneado un código QR, sabes los pasos a seguir:
- Saca tu teléfono, toca la aplicación de escaneo de códigos QR y escanea el código. Lleva alrededor de dos minutos.
- Ve la información sobre el producto (nutrición, recetas, video del uso del producto y como aparece fuera del paquete, etc.). Al igual que utilizando un URL, el tiempo que pasas viendo la información a la que accedes a través del código QR es tiempo bien invertido, pero haz cortado cuatro minutos de búsqueda, que es una eternidad cuando estás de pie en una tienda, por ejemplo.
Lee: Códigos QR y ejemplos de sus usos exitosos
Usa el poder… o perece!
El viejo dicho es que hay dos tipos de gente en los negocios; los vivos y los muertos. Añádele a eso el aumento de la competencia y la velocidad de Internet y te encontrarás con que tienes que ser más rápido … o terminarás más muerto!
Hay un gran número de artículos que afirman que el escaneo de códigos QR está en alza. Hay un número igual, o inclusive mayor, de artículos que los consideran muertos. Así que, al ser una persona de negocios, en busca de los mejores métodos de marketing, ¿cuál crees que es la verdad? Mira la evidencia:
- ¿Por qué los fabricantes de smart phones y tablets continúan pre-instalando aplicaciones de escaneo de si los códigos están muertos?
- Marcas icónicas y exitosas como Coca-Cola, Pepsi, Del Monte, Nestlé, Walmart, Volkswagen, McDonald y Adidas (sólo para nombrar algunas) ¿utilizarían una tecnología muerta para sus negocios?
- Los códigos QR están apareciendo en más productos con propuestas únicas y efectivas.
- Hay más artículos escritos sobre el éxito del uso de los códigos QR que de sus fracasos.
Los códigos QR se han establecido como el método más importante para vincular lo impreso con lo digital. Tal vez esto cambie en el futuro, ¿pero esperarán los consumidores ese futuro? Mientras tanto, aquellos que han renunciado a los códigos QR como herramienta de marketing, no cubrirán el potencial de su marca y por ende perderán frente a los competidores. Pero, algunas marcas tienen que morir. Ese es el Darwinismo – la supervivencia del más apto y los códigos QR son herramientas de hierro mientras algunos vendedores están atrapados en la edad de piedra.
Lee: Los códigos QR NO están muertos y T+ink no es el asesino
Imagen ©GL Stock Images
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